Dijo Sun Tzu: "Para hallar la buena estrategia piensa como un hombre hambriento"
¿Qué opciones tiene pues alguien en tal situación?
1. Construir trampas para cazar animales salvajes (que también podrían cazarlo a él) y vivir en la selva o los bosques
2. Someterse (integrarse) a una mafia, para el despojo
3. Aceptar el albergue de la caridad (ser mendigo)
4. Cometer él el crimen con astucia y en solitario
5. Construir desde el cuerpo y el espíritu con eficacia
Como puede verse el hombre hambriento (todos nosotros en potencia) tiene sólo cinco opciones, y entre ellas sólo una puede calificarse (a los tiempos de hoy) como de "buena" y en el buen sentido de la palabra. Y ésta precisamente exige la fuerza creadora que nos brinda la vida, pero que con el vivir, o sea con el transcurrir del tiempo, puede mermar hasta el agotamiento (por ese todos quieren - tarde o temprano - un paracaídas). Por eso mismo también vemos tanto de lo otro: despojo, mendicidad y crimen. Y hay quien concluya que ¿para qué abandonamos alguna vez los bosques y las selvas?, o más bien, ¿cómo fue que ocurrió ésto?
viernes, junio 27, 2008
Estrategia desde tiempos inmemoriales
Publicadas por Rlpr a las 10:22 a. m.
Etiquetas: Estrategia
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