viernes, diciembre 30, 2011

Para despedir el 2011: Roberto Bolaño (2)

Tomado de El gaucho insufrible

"ENFERMEDAD Y ESTATURA

Pero vayamos al grano o acerquémonos por un instante a ese grano solitario que el viento o el azar ha dejado justo en medio de una enorme mesa vacía. No hace mucho tiempo, al salir de la consulta de Víctor Vargas, mi médico, una mujer me esperaba junto a la puerta confundida entre los demás pacientes que formaban la cola. Esta mujer era una mujer bajita, quiero decir de corta estatura, cuya cabeza apenas me llegaba a la altura del pecho, digamos unos pocos centímetros por arriba de las tetillas, y eso que llevaba unos tacones portentosos, como no tardé en descubrir. La visita, de más está decirlo, había ido mal, muy mal; mi médico sólo tenía malas noticias. Yo me sentía, no sé, no precisamente mareado, que es lo usual en estos casos, sino más bien como si los demás se hubieran mareado y yo fuera el único que mantenía una especie de calma o una cierta verticalidad. Tenía la impresión de que todos iban a gatas o, como suele decirse, a cuatro patas, mientras yo iba de pie o permanecía sentado, con las piernas cruzadas, que a todos los efectos es lo mismo que estar o ir de pie o mantener la verticalidad. En cualquier caso tampoco puedo decir que me sintiera bien, pues una cosa es mantenerse erguido mientras los demás gatean y otra cosa muy distinta es observar, con algo que a falta de una palabra mejor llamaré ternura o curiosidad o mórbida curiosidad, el gateo indiscriminado y repentino de quienes te rodean. Ternura, melancolía, nostalgia, sensaciones propias de un enamorado más bien cursi, y muy impropias de experimentar en el consultorio externo de un hospital de Barcelona. Por supuesto, si ese hospital hubiera sido un manicomio, tal visión no me habría afectado en lo más mínimo, pues desde muy joven me acostumbré -aunque nunca seguí- al refrán que dice que en el país al que fueres, haz lo que vieres, y lo mejor que uno puede hacer en un manicomio, aparte de mantener un silencio lo más digno posible, es gatear u observar el gateo de los compañeros de desgracia. Pero yo no estaba en un manicomio sino en uno de los mejores hospitales públicos de Barcelona, un hospital que conozco bien pues he estado cinco o seis veces internado allí, y hasta entonces no había visto a nadie caminar a cuatro patas, aunque sí había visto a enfermos ponerse amarillos como canarios y había visto a otros que de repente dejaban de respirar, es decir, se morían, algo no inusual en un sitio así; pero a gatas no había visto, todavía, a nadie, por lo que pensé que las palabras de mi médico habían sido mucho más graves de lo que en principio creí, o lo que es lo mismo: que mi estado de salud era francamente malo. Y cuando salí de la consulta y vi a todo el mundo gateando, esta impresión sobre mi propia salud se acentuó y el miedo a punto estuvo de tumbarme y obligarme a gatear a mí también. El motivo de que no lo hiciera fue la presencia de la mujer bajita, que en ese momento se me acercó y dijo su nombre, la doctora X, y luego pronunció el nombre de mi médico, mi querido doctor Vargas, con quien mantengo una relación tipo armador griego millonario, es decir la relación de un hombre casado que ama pero que procura ver lo menos posible a su mujer, y añadió, la doctora X, que estaba al tanto de mi enfermedad o del progreso de mi enfermedad y deseaba incluirme en un trabajo que ella estaba haciendo. Le pregunté educadamente por la naturaleza de ese trabajo. Su respuesta fue vaga. Me explicó que apenas me haría perder media hora de mi tiempo y que se trataba de que yo hiciera algunos tests que tenía preparados. No sé por qué, finalmente le dije que sí, y entonces ella me guió fuera de las consultas externas hasta un ascensor de grandes proporciones, un ascensor en donde había una camilla, vacía, por supuesto, pero ningún camillero, una camilla que subía y que bajaba con el ascensor, como una novia bien proporcionada con -o en el interior de- su novio desproporcionado, pues el ascensor era verdaderamente grande, tanto como para albergar en su interior no sólo una camilla sino dos, y además una silla de ruedas, todas con sus respectivos ocupantes, pero lo más curioso era que en el ascensor no había nadie, salvo la doctora bajita y yo, y justo en ese momento, con la cabeza no sé si más fría o más caliente, me di cuenta de que la doctora bajita no estaba nada mal. No bien descubrí esto, me pregunté qué ocurriría si le proponía hacer el amor en el ascensor, cama no nos iba a faltar. Recordé en el acto, como no podía ser menos, a Susan Sarandon disfrazada de monja preguntándole a Sean Penn cómo podía pensar en follar si le quedaban pocos días de vida. El tono de Susan Sarandon, por descontado, es de reproche. No recuerdo, para variar, el título de la película, pero era una buena película, dirigida, creo, por Tim Robbins, que es un buen actor y tal vez un buen director pero que no ha estado jamás en el corredor de la muerte. Follar es lo único que desean los que van a morir. Follar es lo único que desean los que están en las cárceles y en los hospitales. Los impotentes lo único que desean es follar. Los castrados lo único que desean es follar. Los heridos graves, los suicidas, los seguidores irredentos de Heidegger. Incluso Wittgenstein, que es el más grande filósofo del siglo XX, lo único que deseaba era follar. Hasta los muertos, leí en alguna parte, lo único que desean es follar. Es triste tener que admitirlo, pero es así."

Continúa en el 2012 :-)

jueves, diciembre 29, 2011

Sigue la despedida del 2011

"Yo no olvido al año viejo..."

Al menos un cliente que nos retó al máximo.

Al menos un estudiante que nos recordó lo grato de la enseñanza.

Muchos abrazos que nos dieron la fuerza para llegar hasta aquí. :-) :-) :-)

miércoles, diciembre 28, 2011

Para despedir el 2011: Roberto Bolaño

Tomado de El gaucho insufrible

"LITERATURA+ENFERMEDAD=ENFERMEDAD

para mi amigo el doctor Víctor Vargas,
hapatólogo

ENFERMEDAD Y CONFERENCIA

Nadie se debe extrañar de que el conferenciante se ande por las ramas. Pongamos el siguiente caso. El conferenciante va a hablar sobre la enfermedad. El teatro se llena con diez personas. Hay una expectación entre los espectadores digna, sin duda, de mejor causa. La conferencia empieza a las siete de la tarde o a las ocho de la noche. Nadie del público ha cenado. Cuando dan las siete (o las ocho, o las nueve) ya están todos allí, sentados en sus asientos, los teléfonos móviles apagados. Da gusto hablar ante personas tan educadas. Sin embargo el conferenciante no aparece y finalmente uno de los organizadores del evento anuncia que no podrá venir debido a que, a última hora, se ha puesto gravemente enfermo.

ENFERMEDAD Y LIBERTAD

Escribir sobre la enfermedad, sobre todo si uno está gravemente enfermo, puede ser un suplicio. Escribir sobre la enfermedad si uno, además de estar gravemente enfermo, es hipocondríaco, es un acto de masoquismo o de desesperación. Pero también puede ser un acto liberador. Ejercer, durante unos minutos, la tiranía de la enfermedad, como esas viejitas que uno encuentra en las salas de espera de los ambulatorios y que se dedican a contar la parte clínica o médica o farmacológica de su vida, en vez de contar la parte política de su vida o la parte sexual o la parte laboral, es una tentación, una tentación diabólica, pero una tentación al fin y al cabo. Viejitas que uno diría están más allá del bien o del mal, y que tienen toda la cara de conocer a Nietzsche , y no sólo a Nietzsche sino también a Kant y Hegel y Schelling, para no decir nada de Ortega y Gasset, de quien parecen, más que hermanas, confidentes. Y, en realidad, más que confidentes, parecen clones de Ortega y Gasset. A tal grado que a veces pienso (en los límites de mi desesperación) que en las salas de espera de los ambulatorios se encuentra el paraíso de Ortega y Gasset, o el infierno, depende de los ojos y sobre todo de la sensibilidad de quien mire y ecsuche. Un paraíso en donde Ortega y Gasset, duplicado miles de veces, vive nuestras vidas y sus circunstancias. Pero no nos alejemos demasiado de la libertad: en realidad estaba pensando, más bien, en una suerte de liberación. Escribir mal, hablar mal, disertar sobre fenómenos tectónicos en mitad de una cena de reptiles, qué liberador que es y qué merecido me lo tengo, proponerme a la compasión ajena y luego insultar a diestra y siniestra, escupir mientras hablo, desvanecerme indiscriminadamente, convertirme en la pesadilla de mis amigos gratuitos, ordeñar una vaca y luego tirarle la leche por la cabeza, como dice Nicanor Parra en un verso magnífico y también misterioso."

martes, diciembre 27, 2011

Ya despidiendo el año... "despídanse" de la esperanza de una gasolina barata en Colombia



A $Col 9970 el galón de "extra", son como USD 5,15

¡Plop!

como diría Condorito :-)

***

No vuelvo (yo) a comprar carro hasta que: 1) no quiten el "pico y placa", 2) construyan vías, y 3) quiten la discriminación por IVA a los carros de "gama alta" (o sea a los más seguros, cómodos, etc.) Grrrrrr

lunes, diciembre 26, 2011

viernes, diciembre 23, 2011

Así NO se debe ver el fútbol :(

La transmisión del encuentro Junior-Once Caldas el miércoles por RCN es lo más insoportable que he visto últimamente en TV. Cada 20 segundos (o menos a veces) aparecía el recuadro (abajo, o a la izquierda arriba) con el mensaje publicitario; interrumpiendo: 1) la voz del narrador y comentaristas, 2) las imágenes del juego, 3) la publicidad que se instala alrededor de la cancha.

Sepan los anunciantes que, al menos conmigo, perdieron la plata: me dí a la tarea durante todo el partido de colocar el "mute" cada vez.

¿Por qué tiene que ocurrir algo así tan desagradable, que a nadie beneficia, y que para otros de hecho es un fraude (para los que pagaron por la publicidad alrededor de la cancha)?

R/ Porque el productor no está pensando en el cliente (en el televidente en este caso); porque tal vez cree que éste no tiene opciones; porque se siente todo poderoso en su oferta. También porque el anunciante, ingenuamente, cree que está haciendo un buen negocio al pautar así; también porque el anunciante, para el caso del anuncio de una agencia del estado que apareció como 1000 veces, no tiene que rendirle cuentas a nadie de sus gastos...

¿Podría ser de otro modo? ¿De modo que productores, anunciantes y televidentes resultaran todos beneficiados en virtud del hermoso "contenido" provisto por los atletas durante el juego en el campo?

R/Podría ser; así:

1. Haciendo una producción 1A en la previa al partido, que atraiga durante este tiempo al televidente y al anunciante.

2. Colocando el mensaje publicitario ("opt in" y logeados además los que quieran) en las otras pantallas: PC, Teléfono móvil Internet, Teléfono móvil SMS, iPad, etc. Ésto por supuesto, junto a contenidos valiosos como por ejemplo estadísticas del juego, del jugador, del equipo, de la jugada, etc.

3. Creando nuevos formatos de despliegue; como el que se usó con "Postobon" en la repetición de jugadas importantes: aparece durante un segundo o menos cubriendo toda la pantalla, en el momento en que el televidente está más atento a ésta. Ya se había ensayado con éxito total en Sudáfrica 2010.

4. Cobrando más (y ajustando la producción consecuentemente; y compartiendo con el productor de TV los ingresos) a los anunciantes de la publicidad alrededor de la cancha y en las camisetas.

5. Por último, también por supuesto, ofreciendo una producción PREMIUM, vía Internet, pagada, a quienes estén dispuestos a pagar por ella, con CERO anuncios publicitarios :-)

miércoles, diciembre 21, 2011

Una "ideita" contra el trancón

Se trata de lo siguiente: "sacar" de las calles la circulación y parqueo sobre las vías, de las flotas logísticas que mueven las mercancías que el comercio para comodidad y conveniencia nuestra nos surte a toda hora.

Esto se tendría que hacer vía una combinación de modos:

1. Algunas flotas podrían hacer la tarea a media noche (como hoy ya lo hacen los camiones de la basura; que a propósito deberían hacerlo más silenciosamente).

2. Otras flotas podrían desaparecer del todo en ciertos perímetros de alta densidad comercial; sería reemplazadas por viaductos aéreos permanentes que transportarían "mini-contenedores" a "mini-bodegas" que luego surtirían a los locales comerciales.

3. Las flotas de lavanderías y resto de domiciliarios tendrían entrada a los edificios o a bahías construidas a propósito para su parqueo; y plena libertad de circulación.

4. Las "mini-bodegas" ubicadas en sitios privilegiados, permiten luego el movimiento de las mercancías a discreción por los andenes asistido por "zorras" de mano (o vía bicicletas por las ciclo-rutas).

5. Las "mini-bodegas", los "mini-puertos" y las "mini-contenedores" son todo un nuevo negocio por supuesto ¡no regulado, por supuesto!

(mañana, tal vez más :-)

martes, diciembre 20, 2011

lunes, diciembre 19, 2011

Lápices y esferos

¿Por qué cuando somos niños nos dan lápices para aprender a escribir, para hacer los deberes en el colegio, etc., y ya cuando grandes no podemos equivocarnos y tenemos entonces que usar sólo esfero?

La tinta indeleble es garantía de seriedad, dicen. Nadie firma (ni a nadie se le acepta) un cheque con un lápiz :-)

¿No debería ser más seria a fin de cuentas la palabra empeñada?

Y a fin de cuentas, ¿son más serios los niños o los adultos?

jueves, diciembre 15, 2011

Dos artículos desde Innosight

The Empire Strikes Back

Making Innovation Cheap and Easy

***

¿Qué nos hace pensar que la innovación (y la innovatividad) estarían inaugurando una nueva época en el mundo?

Que nos hace pensar. Que vuelve a hacernos pensar (por supuesto :-) :-) :-)

miércoles, diciembre 14, 2011

El intercambio de banderines



¿Por qué imágenes como esta son cada vez más de antaño?

¿Por qué los niños de hoy conocen más de las estrellas de los equipos que de la historia de los equipos?

¿Por qué ya casi nadie tiene una colección de banderines en su cuarto?

¿Por qué el banderín no es una pieza rutilante en la exhibición de los anaqueles de los almacenes deportivos?

¿Por qué tiene más tiempo y protocolo cantar el "himno nacional" que el intercambio de banderines?

***

PS Los "banderines", las insignias de un equipo o ejército, es lo que cuando arrebatado al otro en la guerra es prueba de su derrota.


Por eso
en el fútbol
el banderín
se
i n t e r c a m b i a (ba :-) :-(

martes, diciembre 13, 2011

Lo primero :-) (a propósito del fin de año que se acerca y el próximo que también)

Todo el mundo quiere todo el tiempo RESULTADOS.
Es más, ¡RESULTADOS rutilantes!
Pues bien, para tal, es menester un ACTUAR así mismo ¡BRILLANTE!
El que a su vez no será posible (no podrá "venir a ser") si antes no se ha PENSADO DURO, DURO, DURO... (en las opciones sobre qué hacer, en su valoración, en la decisión finalmente adoptada)

Lo primero... es lo primero :-)

viernes, diciembre 09, 2011

"Elogio" del columnista en management de The Economist, a Jim Collins (sin comentarios :-)

Aquí la entrada completa

Extracto:

"Schumpeter

Built to last
Jim Collins has stayed at the top by practising what he preaches

Nov 26th 2011 | from the print edition

WHY do some companies flourish for decades while others wither and die? Jim Collins got his start as a management guru puzzling about corporate longevity. Given that Mr Collins has remained at the top of his profession for almost two decades, it is worth applying the same question to him."

miércoles, diciembre 07, 2011

Tiempo, historia y optimismo: paradójica doble relación

No tiene sentido no "ser optimista" sólo porque la historia te muestra que al final todo puede "salir (y casi siempre es así) mal": la historia no tiene porque seguir repitiéndose :-)

Pero tampoco tiene sentido "ser optimista" sólo porque parece que finalmente la historia está cambiando y las cosas por fin empiezan a "salir bien": la historia no tiene porque seguir repitiéndose :-)

martes, diciembre 06, 2011

Cruzar en las esquinas

¿Quién dijo que era más seguro cruzar la calle en las esquinas (por donde está la “cebra”)?

Digo "yo":

Es más seguro cruzar dónde y cuándo no vienen carros

Es más seguro cruzar cuándo estoy menos cansado… por no tener que haber ido a cruzar hasta la esquina

Es más seguro cruzar cuándo estoy atento… y no confiado por estar cruzando en la esquina (por donde está la “cebra” :-)

lunes, diciembre 05, 2011

"Cultura de innovación" y "Cultura para la innovación"

Aquí la entrada completa

Extracto:

"2011: Why Culture is Key

In past editions of the Global Innovation 1000, we found that companies focused on developing cutting-edge products and services fall under one of three fundamental innovation strategy models: Need Seekers, Market Readers, and Tech Drivers. This year, our seventh annual study of the world’s 1000 largest corporate R&D spenders focuses on the link between the three strategy models, culture, and organization — and their effect on companies’ alignment to innovation objectives and the impact on financial performance. The key finding: culture is key to innovation success, and its impact on performance is measurable. Specifically, the 44 percent of companies who reported that their innovation strategies are clearly aligned with their business goals — and that their cultures strongly support those innovation goals — delivered 33 percent higher enterprise value growth and 17 percent higher profit growth on five-year measures than those lacking alignment."

***

Los números "hablan" esta vez... :-)

viernes, diciembre 02, 2011

Diálogos callejeros :-)


jueves, diciembre 01, 2011

Un libro que amerita su lectura...

... d e
a
p o c o

¿Por qué?

1. Porque su autor escribe desde una experiencia bastante peculiar
2. Porque el libro te obliga a preguntarte sobre tí mismo
3. Porque su contenido (las "técnicas") son de invaluable ayuda en más de una situación

:-)