Excelente la columna hoy de Mauricio Reina en PORTAFOLIO. De manera sutil y al mismo tiempo descarada le canta la tabla a las "autoridades" que en la capital de la república de Colombia hacen de las suyas (más bien deshacen) con la economía, la paciencia del ciudadano, la violación impune de la ley, el buen ánimo, la disposición patriótica, los recursos escasísimos (como el tiempo) y la esperanza de que las cosas tendrían que mejorar...
Le faltó a Mauricio Reina eso sí que en el origen del caos está la perversa medida del control de los precios que es sinónimo de obstrucción a la libertad de empresa y por tanto a la agregación de valor. Por eso tenemos ya casi sólo taxis miniatura, con exiguas condiciones de seguridad, con choferes de escasa figura, etc. etc. ¿Qué empresario querría innovar y agregar valor si no puede luego cobrarlo pues hay un precio máximo "¿científicamente? determinado"? Es un hecho que con control de precios lo único que cabe es bajar los costos, a como de lugar... igual el consumidor deberá pagar "la tarifa"
PS1 Con justa razón en inglés "tarifa" es un término que se aplica a las imposiciones arancelarias
PS2 Los precios del servicio de taxis, bajo condiciones de plena competencia y libertad de empresa, podrían ser incluso más bajos que los actuales ¿Por qué no? ¡Claro que sí!
viernes, diciembre 21, 2007
Reflexiones económicas navideñas
Publicadas por Rlpr a las 10:05 a. m.
Etiquetas: Estrategia, Mercadeo
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